No Rest for the Wicked se trata del nuevo juego de Moon Studios, conocidos por ser los desarrolladores de Ori and the Blind Forest y Ori and the Will of the Wisps, referentes en su género. Con esta reputación a sus espaldas, no son pocas las expectativas por este nuevo juego. En este caso se trata de un RPG de acción, que en palabras del propio estudio “aspira a revolucionar el género”.
He tenido la oportunidad de jugar a su early access, porque sí, Moon Studios ha decidido sacar el juego por esta vía. Esto quiere decir que el juego no está terminado, por lo que no estará exento de fallos, de falta de contenido o de características que directamente no existen pero que se irán implementando, todo ello teniendo en cuenta los comentarios de los jugadores. Esto, por cierto, sigue la estela de Baldur’s Gate 3, que también comenzó su vida de esta forma, para luego, con el tiempo, acabar siendo el juego del año. Con esto quiero decir que no es malo que el juego salga en early access, es más, es todo lo contrario, ya que los desarrolladores están en contacto directo con los jugadores y pueden ir aplicando el feedback según vaya llegando. Con esto dicho, paso a hablar directamente de mi experiencia de juego en Steam.
No Rest for the Wicked, su historia y su mundo
Para mi, uno de los principales pilares de un RPG, y de prácticamente cualquier juego, es su mundo. La ambientación hace mucho, nos mete directamente en la piel del personaje, nos transporta a la época y al trasfondo en cuestión, nos hace reír, llorar, sentir lo que está pasando.
La historia de No Rest for the Wicked nos lleva a un mundo de fantasía. Corre el año 841, el rey ha muerto y su arrogante hijo Magnus lo sucede en el trono. Por otro lado, una plaga, conocida como la pestilencia, ha vuelto después de estar extinta durante mil años, asolando todo a su paso. Por último, tenemos a Seline, una figura importante de la iglesia, que cree poder aprovechar la pestilencia para demostrar su valía ante su dios. Estos tres puntos convergen en Sacra, una isla donde los rebeldes y el gobierno local luchan por el control de la decadente isla, manchada por la pestilencia.
Nuestro personaje, a quien creamos y ponemos nombre nosotros mismos, es un cerim. Se trata de un grupo de guerreros con poderes que han jurado acabar con la pestilencia. No obstante, nuestra misión se volverá un poco más complicada de lo previsto dado que nos vemos implicados en la guerra dentro de Sacra.
El apartado audiovisual
Sacra es un lugar castigado tanto por la guerra como por la plaga, al menos en parte. Esto quiere decir que su paisaje está lleno de contrastes. Por ejemplo, tenemos el humedal, donde vemos los estragos de la guerra en el escenario. Cuerpos y sangre por los suelos, barricadas improvisadas y destrucción por todas partes. Por otro lado, tenemos las marismas o el bosque, donde vemos mucha vegetación, flores, animales y color. En la ciudad, Sacramenta, vemos las penurias de la guerra, ciertas partes en ruinas, la gente preocupada, los religiosos rezando a su dios y dando discursos, mientras que también vemos estructuras salidas directamente de un libro de fantasía medieval, como la pajarería o la sala de guerra. Otro ejemplo, para contrastar, son las cloacas, infectadas completamente por la pestilencia. Vemos entornos sumamente lúgubres, llenos de muerte y criaturas horrendas.
En No Rest for the Wicked todos los entornos están cargados de detalle, vemos muchos objetos en cada esquina, vemos como el viento mueve la vegetación, vemos la bruma que acompaña a la pestilencia. La iluminación también está muy cuidada, el pasar del tiempo afecta y podemos observar todas las localizaciones a diferentes horas del día. Los gráficos son muy artísticos, como si todo estuviera pintado, creo, con lápices de madera. Los personajes son carismáticos y variados, además de estar sumamente bien animados, sobre todo las expresiones faciales. Las voces de cada uno acompañan muy bien. Por cierto, el juego está en inglés subtitulado al español.
La música no me ha parecido demasiado destacable, me acuerdo más de un npc que silba la banda sonora de Ori que realmente ningún tema del juego. Aunque es buena, ambienta bien cada situación.
La jugabilidad de No Rest for the Wicked
No Rest for the Wicked es un RPG algo diferente, pero vamos por partes. El combate es muy parecido a un Souls, con barra de estamina, golpes fuertes y normales, esquivas, parrys y bloqueos, incluso las estadísticas del personaje. La novedad son los encantamientos y las runas que podemos aplicar ya no solo a las armas, si no a las armaduras. Por ejemplo, podemos aplicar una runa que haga que el peso de una armadura se reduzca o que una espada haga daño de rayo. También podemos hacer que las armas tengan unas habilidades u otras, como un corte giratorio o un golpe imbuido en fuego.
Hablando ya de las armas, hay variedad, tenemos desde dagas y espadas, hasta bastones mágicos y espadones. Las armaduras también son muy numerosas, cada cual con sus estadísticas. Eso sí, todo está limitado por el nivel de nuestro personaje, no podemos usar equipo que supere al nivel de nuestro personaje, además, algunas requieren que tengamos ciertas estadísticas para usarlas. A parte, también podemos mejorarlo todo en la herrería, con los materiales adecuados.
La muerte es otro tema del que hay que hablar, aquí no perdemos las “almas” donde morimos, sino que nuestro equipo pierde durabilidad. Todo tiene una vida útil, desde las armas hasta las herramientas, que además de por el uso, también se degradan con la muerte de nuestro personaje, eso sí, podemos repararlo todo en el herrero o con un objeto para ello. Al morir apareceremos en el último susurro con el que hayamos interactuado. Como curiosidad, hay viaje rápido, pero sólo funciona desde la ciudad hasta el último susurro que hayamos tocado y viceversa, por lo que hay que tener en cuenta si tocamos uno o no.
Pasamos al sistema de looteo. El mapa está cargado de objetos que podemos recolectar, bien directamente desde el suelo o con el uso de alguna herramienta. Por ejemplo, podemos recoger comida del suelo, hierbas o dinero, mientras que necesitamos un hacha para talar un árbol. Decir que al inicio es algo lento pero a medida que mejoramos las herramientas recolectaremos mucho más rápido. También podemos cocinar, algo importante ya que la comida nos aporta diferentes beneficios, como recuperar salud o resistencia. Necesitamos aprender las recetas antes de hacer ciertos platos. Los recursos se renuevan con el pasar del tiempo. Cada día dentro del juego el mapa cambia, tenemos literalmente una niebla de guerra, que nos indica que la zona que exploramos ha cambiado. Los objetos cambiarán de lugar, aparecerán otros diferente, los enemigos se desplazarán o directamente serán otros, todo es una sorpresa.
El loot también nos sirve para reconstruir y mejorar la ciudad, además de para fabricar objetos y mobiliario, porque sí, podemos tener casa propia donde guardar cosas. En Sacramenta podemos construir una posada o mejorar la herrería, construir un camino o un ascensor a la pajarería, por poner unos ejemplos. Cada construcción requerirá que pase cierta cantidad de tiempo dentro del juego.
El contenido disponible y la hoja de ruta
El contenido que nos ofrece No Rest for the Wicked es considerable, unas 40 horas entre misiones y el crisol, no es poco para tratarse de un early access, eso sí, sólo tenemos un par de misiones de historia. El nivel máximo del personaje es el 30 y tenemos misiones constantemente, algunas se actualizan diariamente mientras que otras de forma semanal. En la caza de recompensas eliminamos a ciertos enemigos, mientras que en los desafíos realizamos ciertas acciones, como bloquear 15 golpes o talar x árboles. A parte, también tenemos las clásicas misiones de ayudar a cierto personaje o de fabricar algo específico.
En cuanto a lo que se viene hay bastante. En la próxima actualización se añadirá un multijugador, donde podremos jugar con nuestros amigos e incluso cooperar en un cofre comunitario. Más allá de eso se vendrán diferentes actualizaciones de contenido y de rendimiento, así como de características y de feedback de la comunidad.
Problemas a destacar
El juego tiene ciertos problemas típicos de un early. El rendimiento en ocasiones deja bastante que desear, aunque tengas un equipo potente. No tenemos opciones de configuración, simplemente podemos elegir entre varios modos de renderizado, por lo que no podemos saber qué estamos tocando realmente.
En lo jugable también hay cosillas, por ejemplo, al ver equipo en el suelo, no sabes si es mejor o peor que lo que llevas si antes no lo coges y como al inicio hay problemas de espacio en el inventario, es algo muy tedioso. También hay bugs, dos veces me he caído por un precipicio porque al personaje le ha dado por atravesar una roca de la esquina o una barra de vida se ha quedado bloqueada en cierto sitio. Al juego le falta, eso es innegable, pero es normal teniendo en cuenta, una vez más, que se trata de un early access.
En definitiva, No Rest for the Wicked es…
No Rest for the Wicked apunta a ser de lo mejor de su género, tal cual. La sensación al jugar, aun con sus peros, es muy positiva. El combate es desafiante, la progresión es satisfactoria y el mundo es rico en detalle. La historia también tiene cierto misterio que me gusta mucho, además de tener unos personajes carismáticos y nada planos.
El contenido además es bastante amplio teniendo en cuenta la condición del título, tenemos horas y horas de diversión. Tengo muchas ganas de ver cómo avanza el desarrollo y de jugar al mejor juego que pueden hacer. No Rest for the Wicked sigue, en mi opinión, un camino muy prometedor.
Acerca del autor
Hago cosas... Es el vecino el que elige al meme y es el meme el que quiere que sean los vecinos el meme
